Represión Del Deseo Materno Y La Génesis Del Estado De Sumision Incons

$18.525

Autor

Editorial

ISBN

9788494827945

EAN

Sin existencias

Entender la vida como una producción deseante en lugar de cómo una resignada carencia (Deleuze y Guattari, 1972) es la clave para imaginarse una civilización no patriarcal: puesto que la carencia y la necesidad llevan a la competencia y a la propiedad; y el deseo, a la búsqueda del bienestar y al apoyo mutuo. La conversión del deseo en carencia es también la clave para organizar la servidumbre voluntaria (E. de la Boëtie, 1550); en efecto, al impedir sus deseos, la criatura entra en la espiral de la carencia y del miedo a carecer, en donde las relaciones de tú a tú entre los amantes se transmutan en relaciones de sumisión/autoridad (A. Moreno, 1989). El estado de carencia está, casi inevitablemente, seguido del estado de sumisión. Por eso se mata a la madre entrañable cuyo propio deseo sacia y alienta los deseos de las criaturas. Y se mantiene oculto este crimen para que no se sepa lo que había antes de la devastación: la verdadera condición de la criatura humana, con una enorme carga libidinal en armoniosa interpenetración con la madre, sin rastro de tanatismos ni de narcisismos ni de edipos innatos. Por eso se ha dicho (V. Sau, 1992) que El Crimen de la Madre es el Secreto de la Humanidad. Y cuentan las autoras de este libro, que cuando lo descubrieron y descubrieron a la madre entrañable, se encontraron con la otra parte del Secreto, escondido precisamente en las entrañas maternas: que el Paraíso existe, que la ciencia el bien y del mal es accesible, y que los deseos de las criaturas se pueden saciar.