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Autor | |
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Editorial | |
ISBN | 9788490452769 |
EAN |
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Antonio Delgado Porras fue un eminente jurista y una admirable persona, consagrado sin fisuras a la protección de los derechos de los autores y a su ejercicio a través de las entidades de gestión colectiva. Y de ahí el acierto del Observatorio Iberoamericano del Derecho de Autor (ODAI) y el Instituto de Derecho de Autor (IA) al instituir un premio dedicado a honrar su memoria promoviendo la realización de estudios de investigación sobre cuestiones de actualidad en torno a la materia. Nacido en Málaga en 1934, falleció en Madrid en 2011. En 1978 entró a prestar sus servicios, como abogado consultor, en la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) de España, y posteriormente fue jefe de su asesoría jurídica, consejero legal y asesor externo. En 2005 fundó el Instituto de Derecho de Autor para el estudio, análisis, difusión y promoción del derecho de autor y los derechos conexos, y fue su presidente hasta su deceso. Integró la Comisión encargada del anteproyecto de la vigente Ley de Propiedad Intelectual sancionada en España en 1987 y fue uno de sus principales redactores. Asimismo fue miembro y presidente de la Comisión Jurídica y de Legislación de la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores (CISAC) y de ALADDA, la rama española de la ALAI (Association Littéraire et Artistique Internationale). Fue el artífice de la continuidad, a partir de 1994, y como Cursos OMPI/SGAE de formación en derecho de autor y derechos conexos para países de América latina aquellos que habían iniciado en 1983 como Cursos OMPI/SUISA que codirigió y a los cuales aportó sus profundos conocimientos, en particular sobre el derecho comunitario europeo. Así, y como consultor de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) para la región latinoamericana, la recorrió en forma incansable habitualmente acompañado por Lola, su esposa e inefable compañera, quien prodigaba el peculiar gracejo de la mujer española. Allí desplegó una intensa labor docente que se extendió a diversas actividades académicas y ámbitos universitarios, al asesoramiento en el desarrollo de las legislaciones sobre derecho de autor y derechos conexos (como en Chile y México) y, especialmente, de las entidades de gestión colectiva. Igualmente prolífica fue su labor doctrinal, desde su Panorámica de la protección civil y penal en materia de propiedad intelectual (Madrid, Ed. Civitas, 1988), de consulta obligada, hasta la ingente cantidad de escritos que produjo, muchos de los cuales, por fortuna, decidió recopilar y publicar en 2007 a través del Instituto de Derecho de Autor, así como su aporte a la actualización de la obra clásica de Hermenegildo Baylos Corroza (Tratado de derecho industrial. Propiedad industrial, propiedad intelectual, derecho de la competencia económica, disciplina de la competencia desleal, Madrid, Civitas/Thomson Reuters, 2009) en la parte sobre el derecho positivo español en materia de propiedad intelectual y el ámbito de aplicación de la ley en esa materia (parte III, los títulos primero a quinto en este último los capítulos I, II, IV, V y VI y el título sexto).